Cualquier viajero ávido de
lectura relacionada con África sabrá que Uganda es el país del este africano
famoso porque en él se encuentra el nacimiento del río Nilo que tantos quebraderos de cabeza dio a
exploradores de la talla de Speke y Burton.
Uganda es un pequeño país,
antiguamente colonizado por los ingleses que ha tenido la mala suerte de hacer
frontera con Zaire y con Rwanda, lugar de masacres étnicas y de violencia, que
acabaron extendiéndose al país.
A pesar de que sus parques
nacionales no poseen tantos animales como los de Tanzania, no es menos cierto
que han ido repoblándolos tras la exterminación de animales que realizaron
varios de sus dictadores en el poder.
La lacra de África han sido siempre
sus dictadores (en muchos casos apoyados por gobiernos occidentales) como Idi
Amin que estableció en este país un periodo de terror en el que murieron miles
de personas, se destruyó el sistema económico y se promovió la lucha de etnias.
A pesar de haber estado más de 20
años con esta situación, hoy en día Uganda ha sabido buscar la estabilidad y
desarrollar un turismo de aventura con camión o 4*4 en el que te sorprendes a
cada paso que das.
Si os leéis el libro de Javier
Reverte “El sueño de África” podréis averiguar gran cantidad de anécdotas e
historias tribales de la zona que rodea el Lago Victoria y empaparos del
espíritu africano.
Este lago que ocupa gran parte
del territorio y forma la frontera con Kenia y con Tanzania  trajo de cabeza a muchos exploradores
que querían a toda costa descubrir dónde nacía el río Nilo.
Mucha gente piensa que el Nilo
nace y muere en Egipto, pero la realidad es que nace en un lugar maravilloso
llamado Jinja (en el que por cierto se puede hacer rafting) ,que se encuentra en
el Lago Victoria y en el que hubo una presencia asiática muy importante. Aquí
llegó el explorador británico Speke de casualidad, y le puso el nombre de su
reina al lago.
Mientras que el Nilo baja hacia
Sudán  se forma un lugar de
cataratas increíble llamado Cataratas Murchinson que no hay que perderse en un
viaje a este país.
Pero no todo es agua allí, sino
que se pueden ver diversos parques como el Park Mbouro con una comunidad de
cérvidos muy interesantes, Queen Elizabeth en el que hay unas puestas de sol
que quitan el hipo con hipopótamos incluidos, Kibale con una comunidad de
divertidos chimpancés o Bwindi que supone la frontera hacia los gorilas.
Si habéis visto la famosa
película “Gorilas en la Niebla”, sabréis que países como Zaire, Rwanda y parte
de Uganda tienen a este peligroso pero fascinante animal. Aunque es muy difícil
y caro acceder a ellos, merece la pena hacer un pequeño desvío e inversión en
pasar unas horas mirando a nuestro antecesor.
Pero Uganda aparte de Naturaleza
tiene otras muchas cosas interesantes.¿Sabéis que es uno de los 10 países del
mundo por los que pasa la línea del Ecuador que divide el Hemisferio Norte del
Hemisferio Sur?
Pues sí, y la prueba la realizas
como todo en África, con lo que uno tiene encima: una palangana llena de agua con
un tapón. Cuando se quita este, en función del lado del Ecuador en el que te
encuentres, el agua va para un lado o para el otro.
Y es que esto es lo bueno de
África, la creatividad e imaginación que tienen en este continente en el que
con cualquier cosa son capaces de crear algo.
Los mercados son una prueba de
ello. En la vida he visto tantas cosas que para nosotros serían inservibles
juntas! Ellos, sin embargo, lo aprovechan todo.
No hay mayor reto que intentar
disfrazarse con cosas compradas en estos mercadillos como el de Fort Portal que
mide kilómetros. Resulta muy divertido pero no ganaríamos un concurso de
carnavales.
África es bullicio, gente, ruidos
y alegría en sus ciudades como su capital Kampala.
Resulta toda una experiencia
subirse a una mezquita para ver desde allí el ambiente, o dar un paseo en moto
para vivir la aventura del tráfico en su más puro estilo.
Las motos van siempre abarrotadas
de gente y cosas que se venden convirtiéndolas en una torre Eiffel con los productos
que van puestos en plan pirámide los unos sobre los otros en el sillín.
Lo más impactante en este país
son sus gentes, tan amables y hospitalarias.  Dar un paseo por las calles de un pueblo, es una experiencia
inenarrable ya que te invitarán a sus casas y te darán lo mejor que tienen. Los
niños te acompañarán a todos los lugares y descubrirás lo que es  África a través de sus habitantes.
Y por muchos parques y lugares
maravillosos que puedas ver, lo más enriquecedor son siempre los oriundos que
a pesar de haber recibido tanto sufrimiento por parte de los países
occidentales y de los monigotes que han puesto en el poder, siempre tendrán sus
puertas abiertas para enseñarte sus costumbres y darte lo poco que poseen.

Alice Fauveau